Los clientes de Koenigsegg dieron la espalda al Gemera de tres cilindros y se pasaron al V8

Koenigsegg Gemera.

Gustavo López Sirvent

La compañía sueca, que tiene una gama de coches de los más caros del mundo, escuchó a sus clientes a los que preguntó si preferían que el Koenigsegg Gemera llevara o bien un V8 o bien un tres cilindros híbridos. La respuesta fue clara y el ocho cilindros salió vencedor, según manifestó el CEO de lafirma, Christian Von Koenigsegg al podcast de Top Gear.

Desde que Christian von Koenigsegg fundara en agosto de 1994, a la edad de solo 22 años, la marca que lleva su apellido, la trayectoría de ésta ha ido subiendo como la espuma. Los precios y las calidades de sus superdeportivos han ido de la mano del crecimiento de la empresa gracias a unos exigentes clientes que han creído en ella. Por eso, ahora Koenigsegg quiere escucharles...

Y es que cuando una persona se gasta cerca de tres millones de euros en un coche bien merece la atención del fabricante, que puso sobre la mesa dos opciones de motores híbridos con el Koenigsegg Gemera: uno con un V8 y otro con un tricilíndrico de 600 CV. Los clientes se decantaron por el primero y desecharon rotundamente el segundo.

El podcast de la revista Top Gear fue el escenario elegido para que el propietario de la compañía sueca comentara que hubo tan pocos pedidos del Gemera de tres cilindros que terminó convenciendo a los pocos que sí lo solicitaron de que también cambiaran al V8.

"En pocas palabras, todos se convierten en V8”, manifestó el fundador de la marca de Suecia a nuestro compañero Jack Rix . “Quedaban tan pocos que pedían el motor de tres cilindros que logramos convencer a casi todos [de cambiar el orden de los motores]”.

Las características técnicas del propulsor V8 híbrido son seductoras. El ocho cilindros de 5.0 litros, acoplado al innovador motor eléctrico de flujo radial “ Dark Matter ” de Koenigsegg, permite al Gemera generar 2.300 CV y ​​2.763 Nm de par motor. Si lo comparamos con el rendimiento de la propuesta de tres cilindros son casi 1.000 CV más (el de tres cilindros tenía 1.400 CV).

Koenigsegg prefirió esconder las especificaciones oficiales de rendimiento del Gemera de tres cilindros. Aun así, se piensa que su eficiencia no quedaría tan rebajada a la del V8 porque se sabía que era más ligero en cuanto a peso.

Sistema Freevalve de turbo-triple

El motor de tres cilindros biturbo de 2,0 litros del Gemera utilizó el sistema Freevalve de Koenigsegg (estuvo más de 10 años trabajando en él). Este bloque mecánico de turbo-triple no usó árboles de levas como un motor al uso. Es por ello que utilizó elevadores electrohidráulicos-neumáticos controlados por ordenador para ejecutar las válvulas de admisión y escape del motor. 

Este sistema permite una sincronización de válvulas que puede variar sin fin, con el objetivo de ajustar el rendimiento, la eficiencia y la conducción extremas. De esta manera, con la citada  sincronización variable de la válvula de escape consigue una mejor respuesta del turbocompresor. Con todo, el motor "Tiny Friendly Giant" del tres cilindros desarrolló 608 CV. 

Cuando se produce la combinación con el mismo motor eléctrico Dark Matter, el Gemera de tres cilindros llega a alcanzar los 1.419 CV y 1.849 Nm de par motor. Esto quiere decir que tiene 203 CV más que el Bugatti Veyron Super Sport de 16 cilindros y cuatro turbos, con lo que no podría haber presumido de ello, pero los clientes no quisieron...

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Etiquetas: Hiperdeportivos, Koenigsegg, Coches híbridos